El egocentrismo un tanto exagerado que sufren los nativos de Leo se opone claramente a las necesidades de continuo amor de Cáncer. Este grave problema de base que a priori perjudica la relación, se ve atenuado por el deseo innato que tiene Cáncer de amar. Tú, Cáncer, buscas una figura paterna con la que sentirte protegido, figura que puedes encontrar en el superprotector Leo. Como consecuencia, tiendes a mostrarte perezoso y a no hacer nada por la relación. Delegas toda la responsabilidad en Leo y te acoplas a su propia idea de la convivencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario